CRÓNICA DE UN TRATAMIENTO

Para poder entender por qué surge la magia durante un tratamiento, deberemos darnos cuenta de la relevancia que se deriva de la sincronía de dos seres vivos. Es por ello, por este intercambio de información Natural, por lo que nuestro trabajo nunca va a poder ser gestionado por máquinas. Forma parte de la vida en movimiento, de la vida insuflada como un Verbo sin concesiones. A pesar de los cientos de ladrillos y cemento que percibamos en los pacientes, será nuestro deber siempre el contemplar la posibilidad del nacimiento de una flor entremedias, aunque no funciona, si en el arte del tratamiento no es etiquetado como un acto de servicio. Y esto es más fácil de decir que de sentir. Pero es desde esta divina exigencia donde la Marea accederá a prestarte, en menos de lo que tarda un suspiro, sus ojos de la Verdad y no de lo verdadero. Solo desde una calma trabajada y cercanamente tutorizada aprenderemos a reconocer los incontables matices y texturas que esconde la Inteligencia que gobierna al paciente en su forma y función.

A este lugar de encuentro o punto de encuentro, se accede una vez el paciente y la Respiración Primaria nos hayan reconocido como un Fulcro o ancla para el proceso terapéutico. Aprender a identificar esta sensación es fundamental y necesario. De lo contrario creeremos estar accediendo y sincronizando con las necesidades de la Respiración Primaria cuando en realidad serán un espejo de las nuestras. Este hábito es muy común en los Osteópatas Biodinámicos y puede llegar a un enquistamiento crónico que después cuesta mucho trabajo de reemplazar.

Con nuestro ser en calma sin prejuicios y una vez reconocidos como fulcros para ese momento presente, la Inteligencia va a proponerte como soporte para la necesidad del paciente que tu grado de Transparencia va a poder y saber acompañar. Por ello la llamamos Inteligencia. Ella es capaz de ver lo que tú eres capaz de sacrificar y entregar para que el paciente mejore. Esta es una de las posibles respuestas que dan solución a la pregunta del porque, si he conseguido establecer el Neutro durante 5 tratamientos en un paciente ¿Porqué no es capaz de mejorar? Es en ese instante cuando te encuentras con tu desnudez profesional y sincera frente a la Marea que es a la única que nunca, por mucho que lo intentes, vas a poder engañar.

Por ello la Neutralidad debería crecer en nosotros como una vivencia muy íntima, que cambia y debe ser libre para cambiar. Que con mucha autocritica mejora y no de forma natural con el paso de los años como es comúnmente aceptado. En mis manos he podido acompañar a Osteópatas con más de 20 años de experiencia cursando seminarios de osteopatía Biodinámica que no entendían cual y donde era su lugar durante el tratamiento y como era su relación con la Neutralidad. No habían pasado el puente que lleva la necesidad a la Prioridad, de lo verdadero a la Verdad.

Por lo tanto, un factor a tener en cuenta es que nuestro mental también aprende con nosotros. Podríamos decir que se especializa a la par nuestro y se escurre entre las grietas insólidas de confianza y Fe tejidas desde nuestro ego espiritual. De esta manera al principio, a mitad y/o al final de la sesión lo que tú crees ver como inherente será producto de tu imaginación. Y en esferas de alta profundidad de tratamiento llega a existir una delgada línea, donde se conoce la falsa creencia que una vez superados los primeros paisajes y ralentizado nuestro observador, no hay espacio para nuestra Monkey Mind.

 Una vez hayamos aprendido a reconocer la Prioridad, esta nos va a informar con mucha exactitud y antelación de cual va a ser el destino elegido por la Potencia en el tratamiento en Ignición, forma y/o función a través de los 3 metabolismos: Metabolismo Original, funcional (Zona B’) y molecular. ¡La luz viaja a mayor velocidad que el trueno! Al fin y al cabo, nosotros no somos los que curamos. Por ello el querer entrar en una necesidad (fulcro) con el fin de reequilibrar algún espacio, solo nos servirá de calentar al fluido de forma consciente. El trabajo de elección solo es reservado para inteligencias Divinas.

Gracias a la mirada Simple aprenderemos directamente de lo ocurrido en el tratamiento. Ese es nuestro verdadero profesor. La función de un Mentor debería plantearse como un acto de verdadera responsabilidad, ya que todos los alumnos carecen de visión hacia el Maestro Mecánico. Son literalmente ciegos. Nos van a creer porque ellos nos han escogido para ser guiados. Ni siquiera se plantean si nosotros como Mentores somos capaces de diferenciar entre la Verdad o lo verdadero. Y eso merece la mejor de nuestras atenciones en acompañamiento y sostenimiento hacía el alumno, con el fin de que éste logre ver detrás del Fulcro. Es sencillamente en este espacio donde tu eres capaz de mantener la mirada a la Verdad. Donde el conocimiento no entiende de lugar, pasado, presente ni futuro. Es desde este paradigma donde emergieron los Fulcros Originales y la Matriz Biodinámica, así como principios que todavía están por descubrir. Donde el estado de Intelequia nos permitirá utilizar, bajovlas órdenes de la Marea, nuestros ficheros de fisiología, anatomía, embriología, clínica, etc con el fin de concretar y traducir desde el Silencio que entierra a la embriología el acto clínico dibujado por el propio paciente. Rollin Becker cita:

“Mi tacto es profundo en la vista, en la sensación y en el conocimiento y, sin embargo, no limita o bloquea la estructura-función de los tejidos que estoy examinando.

Puedo dar otro paso en el desarrollo de mi tacto. A través del punto de equilibrio del fulcro y la profundidad del tacto de mi dedo, puedo desarrollar una conciencia consciente de la potencia y la estructura-función de los tejidos del cuerpo del paciente.” Rollin Becker DO

 Por último, nos queda el saber reconocer uno de los fenómenos más difíciles de ver: el final del tratamiento. ¿Cuándo tengo que quitar las manos? Es una de las preguntas con mayor demanda en los cursos. Y no es para menos. Es de vital importancia el acompañar de la mano tratamiento hasta que él diga ¡Gracias, pero ya no te necesito! El aprender esta habilidad te ayudará a comprobar tus niveles de compasión. Sí, compasión. Por mucho que parezca lo contrario el querer “sostener” al paciente sin necesitarlo, además de forzar el tempo del fluido, es un fiel indicador de actividad reactiva al ruido que se ha apoderado de nuestro mental, informándonos -sin perder nunca nuestra mirada autocritica- de que en algún momento del tratamiento nuestro mental cogió las riendas.

Es bien sabido que en osteopatía biodinámica somos conocidos por “no hacer nada”. Pero eso no es del todo cierto. Para empezar, hay una gran diferencia, pero a veces con un límite muy fino, entre estar pasivo y estar neutro. Rollin Becker solía decir:

Siempre hay tres factores a considerar cada vez que un paciente entra en su consulta: las ideas y creencias del paciente de lo que él considera que es su problema, el concepto del médico de lo que considera que es el problema del paciente y, por último, cuál es la integridad anatómica y fisiológica del cuerpo del paciente que conoce el problema…. aunque es difícil encontrar palabras para describir la función dentro de los tejidos vivos.” Rollin Becker DO

Es desde la neutralidad, el estado emergente en forma de recuerdo, desde dónde se encuentra el potencial de nuestra mejor versión. Aprendamos a utilizarlo con responsabilidad, a fin de devolver la máxima funcionalidad posible a nuestro paciente, al margen de en qué momento del camino nos encontremos.

Confiad que la calma, os guiará en el tratamiento y aprender a percibir desde el corazón. No desde el lugar anatómico; si desde lo que su palabra encarna.

 

Carlos E. Marqués DO

(c) Biosform Octubre 2022